El Poder Transformador del Lenguaje: Somos Personas con ADEE
En nuestra sociedad, el lenguaje desempeña un papel fundamental en la construcción de la realidad. Las palabras que utilizamos para describir a los demás y a nosotros mismos pueden tener un impacto significativo en la percepción y el trato que recibimos. Es por eso que hoy, desde nuestra entidad de personas con acondroplasia y otras displasias esqueléticas con enanismo, queremos enfocarnos en un importante cambio de lenguaje y, con ello, un cambio de percepción.
¿Por qué no somos personas de talla baja ni personas pequeñas?
Reducir a las personas con acondroplasia y otras displasias esqueléticas con enanismo a términos como “personas de talla baja” o “personas pequeñas” es, en última instancia, reducirnos únicamente a nuestra estatura. Esta visión limitada ignora nuestra totalidad como seres humanos, nuestros logros, habilidades y contribuciones a la sociedad. Somos mucho más que nuestra estatura y merecemos ser reconocidos como tales.
No somos enanos, somos personas con ADEE
Es importante destacar que no somos “enanos”. Este término, aunque a menudo utilizado de manera despectiva o peyorativa, no refleja la dignidad y el respeto que merecemos. En lugar de ello, preferimos utilizar el término ADEE, que significa Acondroplasia y Otras Displasias Esqueléticas con Enanismo. Este término respeta nuestra identidad y nuestra diversidad.
Un llamado a la sociedad
Hoy, a través de este artículo, nos unimos a la iniciativa de la Fundación ALPE para difundir el uso del término ADEE. Exigimos a todas las esferas de la sociedad, incluyendo administraciones, organizaciones y a cada individuo, que se unan a este cambio de lenguaje. Reconocemos que la lengua no solo nos define internamente, sino que también nos ayuda a entendernos y comunicarnos con los demás en la sociedad en general.
El poder transformador del lenguaje
El uso del término ADEE en lugar de “enano” o “personas de talla baja” representa un paso importante hacia la inclusión y el respeto hacia las personas con enanismo. Al reconocer la importancia del lenguaje en la construcción de nuestra realidad, podemos trabajar juntos para promover una sociedad más inclusiva, donde todas las personas sean valoradas y respetadas en su totalidad.
Construyamos un mundo más justo y equitativo
Adoptemos el cambio y utilicemos el poder del lenguaje para construir un mundo más justo y equitativo. Seamos conscientes de la forma en que nos referimos a los demás y celebremos la diversidad en todas sus formas. Juntos, podemos crear una sociedad que valora a todas las personas, independientemente de su estatura, y promover un mundo donde todos puedan prosperar sin obstáculos.
La elección del lenguaje es una elección de respeto y dignidad. Optemos por el respeto y llamemos a las personas por lo que son: personas con ADEE.